Un día, en el Jardín del Edén, la primer mujer miró al cielo y dijo:
"Hey, Dios, Tengo que hablarte de un problema"
Dios: "Dime, estoy aquí para ayudarte"
"El problema es éste: Te agradezco que me hayas creado, que me hayas hecho este hemosísimo jardín, todos estos maravillosos animales... pero yo no me siento realizada"
"Como es posible?, Eva"
"Es que me siento sola, y si tengo que ser sincera, ya me cansé de las manzanas!"
"Entiendo... Bueno, no hay problema, te crearé un hombre"
"Un hombre? Y qué es?"
"El hombre será una criatura... rudimental. Lo haré de modo que pueda satisfacer tus necesidades físicas y emotivas. Pero será uno que podrá decirte la verdad o engañarte según como se le cruzan los cables. Será más grande y más fuerte que tu, así podrás dejarle hacer las tareas más pesadas, pero a veces puede que se vuelva violento. Para pasar el tiempo invertará cosas extrañas, como ir a cazar. Te mirará como si fuera un idiota, con una mirada insistente. Será bastante torpe y se divertirá con ocupaciones infantiles como agarrar a patadas una pelota. Será tan presuntuoso que te creará un sinfín de problemas. No será muy despierto y bastante seguido necesitará que le digas qué y cómo hacer. En pocas palabras: tendrás que tomarlo de la mano y enseñarle el camino..."
"Parece interesante, es más, podría ser incluso una cosa divertida... No es que hay alguna condición extraña imposible de cumplir, no?"
"No, no, ninguna condición extraña, solo un mínimo sacrificio: como te dije, será bastante egocéntrico... así que tendrás que hacerle creer que ha sido creado antes que tu. Éste será nuestro pequeño secreto, de mujer a mujer"
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